Una dieta balanceada, en la que se modere el consumo de grasas y azúcares y se incluyan alimentos de todos los grupos en cantidades adecuadas está asociada a un menor riesgo de padecer enfermedades.

Las frutas y verduras son los alimentos más saludables que hay, y son especialmente importantes en la dieta de los niños, pues aportan gran cantidad de vitaminas, minerales y fibra.

Toma nota, porque te explicaremos algunos alimentos que le ayudarán a tus pequeños a conservar una buena salud por los múltiples beneficios que pueden aportarles. Ya sea como postre, guarnición, o snack para llevar al recreo, ¡no olvides incluirlos en su dieta diaria!

Manzana

Es una fruta muy completa y con un sinfín de propiedades para el organismo. La manzana es fuente de fibra, lo que ayuda a regular el tránsito intestinal, y contiene altos niveles de potasio, magnesio, sodio, fibra, calcio y vitaminas A, B, C y E. También es súper hidratante y aporta un dosis extra de energía, al ser un alimento rico en hidratos de carbono de absorción rápida.

Plátano

El plátano e s rico en vitaminas A, B, C y E, tiene alto contenido en hierro y posee grandes cantidades de fibra, calcio y potasio, lo que ayuda a equilibrar la tensión arterial, dotar de energía al organismo y prevenir la aparición de calambres musculares, un problema muy común especialmente en niños deportistas.

Uvas

Esta fruta es rica en hierro y potasio, por lo que resulta perfecta para consumir como snack saludable para llevar al recreo. Además, no contienen colesterol ni sodio, así que cuida la salud de los riñones, hígado e intestinos. Son un potente antioxidante, con alto contenido en vitaminas A, K y B1, que ayuda a mantener los huesos fuertes y a proteger la piel, tan delicada en la infancia.

Vegetales de hoja verde

Las verduras de hoja verde tienen un alto contenido nutricional y aportan grandes beneficios al organismo. Son ricas en vitaminas A, C y K, ayudan a disminuir el riesgo de aparición de diabetes tipo 2 y combaten la anemia gracias a sus grandes cantidades de hierro.

Coliflor y brócoli

Dos de las verduras que más vitaminas, minerales y propiedades aportan. Ambas son una excelente fuente de fibra, contienen grandes cantidades de ácido fólico, y aportan vitaminas (A, C y vitaminas del grupo B) y minerales, destacando especialmente el calcio, potasio y fósforo.

Calabacita

Esta verdura suele ser una de las favoritas de los más pequeños por su suave sabor, y una de las primeras en incorporarse a la dieta cuando comenzamos con la alimentación complementaria. Aporta abundante fibra y cantidades notables de ácido fólico, potasio, hierro, manganeso y vitaminas A y C. Por tanto, es un perfecto aliado para mantener fuertes los huesos , proteger el sistema digestivo y cuidar la salud del sistema nervioso y el sistema inmunitario.

Zanahorias

La zanahoria es un alimento excelente desde el punto de vista nutricional gracias a su contenido en vitaminas y minerales. Es fuente de vitaminas A, E y grupo B, como los fosfatos y la vitamina B3 o niacina. En cuanto a los minerales, destaca el aporte de potasio, y fósforo, magnesio, yodo y calcio.

Alcachofas

Una verdura conocida por sus múltiples propiedades, especialmente por proteger frente a enfermedades cardíacas y reducir el colesterol. Las alcachofas contienen cinarina y fibra, que favorecen la digestión, así como importantes cantidades de fósforo, hierro, magnesio, calcio, potasio y vitaminas, entre las que destacan la vitamina B1, la vitamina C y la niacina.

Así que ya sabes, ¡los buenos hábitos alimenticios sirven como barrera para las enfermedades! No olvides consultar siempre a tu pediatra sobre la alimentación de tu pequeño.