Renee es la madre de Gage, un niñito de 5 años que asiste a la escuela regular y normalmente la gente que lo conoce no sospecha que tiene un trastorno del espectro autista. Cuando nació Gage sus padres decidieron realizar un pinzado tardío pero que permitiera aun así almacenar la sangre de cordón.

A los 6 meses Renee empezó a notar ciertos signos que la preocupaban. Veía que Gage gateaba asimétricamente, hacía movimientos repetitivos y no hacía contacto visual. Para los 2 años, fue diagnosticado con un Trastorno del Espectro Autista con un grado que requeriría apoyo considerable. Renee relata que a los dos años Gage no hablaba y socialmente interactuaba como si tuviera 6 meses. Con el diagnóstico Renee se dedicó a entender mejor el trastorno de Gage e intentó enrolarlo en un estudio de acceso expandido de la Universidad de Duke. Lamentablemente Gage no fue candidato para el tratamiento porque las células de la sangre del cordón umbilical estaban contaminadas con E. Coli, pero conocía de la opción que podían representar las células mesenquimales del tejido del cordón. Renee encontró un laboratorio en Estados Unidos que preparó las células y las envió para que fueran aplicadas por uno de los médicos de Gage cerca de casa.

A los tres años Gage aun no hablaba, pero después del tratamiento con células del tejido de su cordón aumentaba constantemente su vocabulario, tres semanas después le dijo a su madre por primera vez “I love you so much”. Gage ha recibido otros 4 tratamientos con células mesenquimales y hoy, a los 5 años, no para de hablar. Al punto que Renee debe de recordarse que algún día rezó porque su hijo pudiera hablar.

Renee quiere compartir con otros padres que los tratamientos con células mesenquimales en autismo son experimentales y no existe una garantía de que funcionen. Los padres que deciden intentar esta opción deben de ser realistas y saber que estos tratamientos no representan una cura sino la posibilidad de generar mejoría en las habilidades de su hijo. Ella sintió que si no lo intentaba podría arrepentirse.

Esta historia fue originalmente publicada en https://parentsguidecordblood.org/en/news/how-cord-tissue-changed-my-sons-life

* Las historias compartidas son de tratamientos experimentales realizados en instituciones no afiliadas a Cryo-Cell de México. Las respuestas a los tratamientos con células madre pueden variar y no es posible establecer la eficacia y seguridad del tratamiento mediante un testimonio. Los ensayos clínicos controlados, ciegos y aleatorizados permiten obtener la información estadística que permita determinar la seguridad y eficacia de un tratamiento para su aprobación.